Una comunicación inteligente puede convertir toda la hostilidad y agresión en una situación cooperativa y llena de respeto.

  1. Reúnete con esa persona en privado. Negociar con personas difíciles en un ambiente privado es más fácil que hacerlo con público.
  2. Consigue un lugar neutral. Elige la sala de conferencias o ir a tomar un café reduce la sensación de poder de esa persona.
  3. Sé asertivo. No dejes que te intimiden. Confía en tu autoestima, tus conocimientos y la convicción con que te expresas. Las personas difíciles o agresivas respetan a aquellos que demuestran fuerza en su diálogo.
  4. Ofrece soluciones. Si tienes un problema con alguien lo mejor es buscar en solucionarlo y no agrandarlo. Las personas agresivas tienden a controlar sus emociones cuando observan que la otra parte busca cooperar y comunicarse.
  5. Visualiza las consecuencias. Antes de enfrentarte a esa persona difícil, piensa en el panorama y en sus reacciones, de esta manera podrás anticipar cualquier comportamiento y tendrás la solución en tus manos.